domingo, agosto 21, 2016

BURKINI

Me considero tolerante, paso de etiquetar a la gente por su tendencia sexual, política o social, que cada uno se lo monte como quiera, simplemente que el ser respetado implique respetar a los demás, pero hay cosas que se me atragantan, no me justificare diciendo aquello de “no soy racista”, como siempre he dicho, hijos de mala madre los hay de todos los colores, pero… eso del burkini me sienta como una patada en el trasero.
Que te vayas a una playa, te deleites de un esplendido sol y de otras cosas y de golpe veas a cuatro mujeres vestidas como cucarachas de carnaval meterse en el agua, la verdad da como un yuyu tremendo, y además asustan a los niños,  a mayor abundamiento no hace mucho en un concurrida playa se metieron dos con abrigo, lo cierto es que piensas que igual es un anuncio o que se les ha ido la olla.
La mujer lleva muchos años luchando por la igualdad, por conseguir metas sociales que por supuesto se merece, incluso hoy en día y después de tanto, siguen sin equiparación de salarios, que luchen cada día contra todo y que de golpe veamos a la mujer retroceder al silo XV, mientras sus maridos se deleitan la vista como babosos, es algo que tendría que llamar poderosamente la atención de esas feministas que sorpresivamente callan y otorgan.
Que recen a su ala, que adoren a su profeta, pues muy bien, pero que quieran imponer sus creencias llevándonos al medioevo, por aquí no paso, si no les gusta occidente, pues… caminito a casa.
En una palabra, como he dicho, respeto a todos, pero también exijo respeto, y querer imponer las  women de negro del burkini en nuestras playas, no  es que este mal, es patético y un insulto a nuestra forma de vida.