miércoles, marzo 09, 2011

MAQUINAS, MAQUINAS, MAQUINAS...

Vivimos en un mundo donde van imponiéndose las máquinas, por supuesto habrá quien diga que la tecnología a mejorado nuestras vidas, pero en cierto modo, la ha complicado para todos aquellos que no la dominamos y que nos sentimos desconectados y desvalidos ante un mundo viejo que se nos va sin remedio y sin pausa. Hoy, vivimos enchufados a los aparatos como los enfermos terminales en cualquier hospital, si queremos trasladarnos hay que poseer una tarjeta para poder pasar el control del metro o entrar en el bus, para entrar en los recintos e incluso para acceder al puesto de trabajo, para poner funcionamiento el ordenador de una clave y una serie de preguntas de acceso, para viajar, lo mas barato es buscar los vuelos en internet y a través de este medio elegir asiento y sacar las tarjetas de embarque, en algunos supermercados nos convertimos en cajeros al pasar los productos por la maquinita e incluso ya podemos hacer las compras sin acudir al establecimiento. Vemos la vida en HD a través de una pantalla de LCD, leemos los periódicos a través del periódico digital, compramos lo que nos machacan dia a dia los medios, creemos tener una númerosa cantidad de amigos porque de cada dia vamos añadiendo a alguien al facebook u otro de las ya cientos de redes sociales, incluso hemos llegado al extremo de congeniar a través del e-mail e iniciar y terminar asuntos sin haberle visto la cara a la contraparte, incluso, los hay que se montan verdaderas orgias onanistas a través de la web con la cam, en una palabra vivimos conectados a la gran maquina de nuestro tiempo.

En ocasiones miro los libros que he ido amontonando a través de los años, libros que cuido y que constituyen la biblioteca de papel, en ocasiones me asalta la rabia al pensar que un angelito de nietecito algún dia los convierta en soporte digital, para luego sacar unas eurillos en alguna libreria de lance y en el peor de los casos los use para la papiroflexia, incluso, cuando en ocasiones intento huir de este raro mundo, tomo un camino y no hallo mas que ladrillo, excavadoras, grupos electrógenos y alguna que otra hormigonera, testigos mudos del desorden y la avaricia, incluso los campos carecen de la mano del hombre, riego por goteo, recogida selectiva etc. por ello, cuando alcanzo un lugar, en ocasiones casi remoto, donde siento la naturaleza de siempre, me paso un buen rato y aprovecho para leer algunas páginas de uno de esos libros ya olvidados, dudando si llegara el dia en que me lo prohibirán, o me obliguen a tener una tarjeta para el acceso a la tranquilidad, no se, a veces pienso que soy miembro de una especie a extinguir o simplemente carente de esa nueva filosofía que nos hace comprender que nuestro mundo ha envejecido y que lentamente fenece.

3 Comments:

At 13 de marzo de 2011, 11:07, Anonymous Anónimo said...

Efectivamente apreciado Javier, estamos en una ciudad que posiblemente empieza a no ser la nuestra, pero hay que reconocer que este avance en el mundo de las maquinas, hacen que nosotros podamos comunicarnos y exponer nuestras quejas, esto como bien comentas, que nos prohíban hacerlo.
El problema es no saber controlar lo que hacemos y como usamos nuestro tiempo con estás dichosas maquinas. Yo empecé en esto del blog a través de un amigo, y mejor hubiera sido otra cosa, porque indirectamente ha influido en buscar y mirar otros bolgs y así llegar al tuyo.
El problema es no saber, o mejor dicho, ser consciente de lo que escribes en este mundo de la informática, principalmente en las redes sociales, yo solo conozco el Facebook, y lo que veo no me gusta, parece no ser conscientes de los que escribimos y como colocamos nuestra fotos.
Sería injusto decir que cada semana me leo un libro, pero la biblioteca de papel parece que poco a poco irá a menos, porque la juventud de hoy, según parece, no esta para coger un libro de papel, porque hay libros en tabletas informáticas, o sea apreciado Javier los que son como tú, según parece ser tenéis los días contados, o no.
Me gusta cuando voy al campo a realizar una “torrada” siempre me llevo un libro o revista para pasar un tiempo relajado mientras veo a mi familia disfrutando del día.
Espero que esta tarjeta que da acceso a la tranquilidad no sea impuesta, porque te aseguro que realmente, como bien comentas, este no sería mi mundo, y sí, estamos viviendo en un país donde todo se prohíbe a decretazos, parece que estamos en plena dictadura, y está, nos es franquista, está és socialista.

Quieroseryo

 
At 13 de marzo de 2011, 20:49, Anonymous O señor dos camiños said...

Evectivamente, todo ruido,máquinas, aparatos, tanto que, incluso si uno se va al "Camino" a descansar el alma, a veces tiene que salirse de las rutas marcadas para tener un poquito de tranquilidad, ¿verdad? Pero al menos todavía nos queda eso. Es el Privilegio de unos pocos.
Abrazobesos.
O señor dos camiños.

 
At 15 de marzo de 2011, 23:12, Anonymous Anónimo said...

Asi es amigos,eso es evolucion segun dicen los jovenes,pero aquellos que ya tenemos una edad esto se nos hace un tanto complicado,el tema esta o caminas a la par, o de lo contrario segun para que te has quedado desfasado,y como en todo en esta vida todo tiene sus pros y sus contras. Yo personalmente me marcharia a vivir alejado de la ciudad,a un sitio donde plantar cuatro tomates,lechugas...etc ,e intentar sobrevivir sin tantas maquinass...!!
Bueno amigos,deciros que sois afortudados los que podeis alejaros por un tiempo de todo y de todos.
Saluditossss

 

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