LOS DE SIEMPRE

Dios me libre de restar o quitar derechos a nadie, por tanto, respeto el de huelga desde la perspectiva de aquel que entiende que en ocasiones es la única solución de presión contra el empresario, pero en esta puñetera piel de toro (exceptuó del toro a la Generalitat) se tiende a echar por la borda la negociación y salir por la tangente, o sea, ni chicha ni pescado sino a ostias. Es un hecho que mas de una huelga salvaje ha llevado a la quiebra a muchas y demasiadas empresas, es un hecho que existen sindicalistas apoltronados que, justifican sus horas sindicales y su no hacer, convirtiéndose en guerreros temporales en favor de los compañeros (que cubren continuamente su turno), es un hecho que la amenaza de huelga contra la Administración, hoy por hoy se ha convertido para las dos centrales mayoritarias en una forma de recaudación a base se subvenciones a cada vez mas y mejor.

Lo que me toca lo que hay que tocar, es cuando esa huelga es de los servicios públicos, o sea que fastidia que le reivindicación de un beneficio para unos pocos sea la ruina de muchos, como dice Manolo, “si estamos en democracia, y son cuatro gatos que joden a los demás, entonces votemos y que se jodan ellos”·

Cuando hemos terminado con la del metro de Madrid, ahora nos toca a todos con esa de los privilegiados controladores, es hasta vergonzoso que fulanos y fulanas que perciben salarios desorbitados, se planten y fastidien las vacaciones a miles de hijos de vecino que se va por ahí o a todos aquellos que vienes por aquí, a todo ello, añadir las anulaciones y los desistimientos que conllevan cuantiosas perdidas a las empresas, pero las cosas son así, no estaría de mas que todos aquellos que nos pudiéramos ver afectados nos plantáramos ante los piquetes y en plan marxa les metiéramos las pancartas por donde les quepa.

No pretendo negar el derecho a nadie, pero cuando su ejercicio supone la perdida del de esa mayoría en muchos casos borreguil debería llevarnos a una Ley de huelga que regule este tipo de situaciones, obligando a prestar el servicio publico que les corresponde y tomar otras medidas de presión o que se planten en casa del ministro de turno y le mientes a la madre que le parió.

Tengo mucho que decir de este gobierno del zparo, pero reconozco que el Sr. Blanco, los tiene bien puestos, espero y deseo sepa manejar la situación como otras veces y si no les puede meter la pantalla de radar en el culo al menos que los joda de alguna otra forma, de hecho, creo tiene el beneplácito de esa mayoría que soporta con cabreada resignación los caprichos en ocasiones de los privilegiados.