martes, junio 19, 2007

SALVAR EL CULO

Durante cientos de años, los hombres, las tribus, los pueblos, las ciudades… se enfrentaban al vecino por razones de conquista o de defensa, siendo los jefes y reyes, arropados por sus nobles o los nobles escudados por los reyes quienes enarbolaban la causa y, la plebe quien sufría las consecuencias, el aldeano, era llamado a filas y llevado al campo de batalla sin saber para que puñetas iba a dar su vida, de hecho (todo hay que decirlo) tampoco no creo le importara demasiado, era su triste y servil condición.
Son otros tiempos y se esgrimen otros argumentos, pero al fin y al cabo son las mismas causas, en los frentes se sigue combatiendo, sin tener ni puñetera idea del porque se esta allí, en demasiadas ocasiones el destino es inherente a la condición.
Lo expuesto viene a colación a que al "principito enrique" hijo de la rubia albión, a pesar de haber realizado la instrucción militar “como todos los demás” (eso es coña marinera) y obtener el despacho de oficial, le han prohibido ir con su regimiento en misión a Irak. El Jefe del Estado Mayor General Dannatt, ha sido tajante al indicar que no podía poner en peligro la vida del aguerrido teniente y la de sus “escoltas”, señalando el generalote que al “royal menber”, le ha prohibido las salidas nocturnas y el “botellón” (pobrecito), justificando tal medida en que sería contraproducente que la foto del oficial de “juerga” se exhibiera junto a la de un soldado de su regimiento muerto en combate por la patria, la bandera, la reina y por la madre que los parió.(Lo último no lo ha dicho el general, es cosecha propia...).
Al enriquito lo han destinado mientras tanto al servicio de guardia y protocolo en las ceremonias de su abuelita, mas que nada para que el adusto militar se distraiga y salga en las fotos del festejo protocolario, es una oportunidad que se da al pueblo de poder verlo engalanado y gritarle eso de ¡handsome, handsome!. (Marujotes/as hay en todos sitios)
No me vale la excusa de la línea sucesoria y todo esto, en nuestro país de paises creo que el lequio, siiiiii ese de la picha falsa (dicen los envidiosos) es el número treinta y pico en la sucesión al trono de este reino, por ello, y siendo tantos en todas partes los de sangre azul y pedo de "chanel five", no me vale eso de que se les exima de dar el callo.
No ignoro que alguno aducirá que no se trata de eso, sino de que la muerte de tan insigne personaje podría ser empleada por la propaganda “enemiga” incluso abrir los ojos al populacho y negarse a seguir manteniendo la guerra, ya lo se… ¡maldita política de siempre!
En una palabra que te crees o nos hacen creer que hemos alcanzado las más altas cotas de democracia e igualdad y resulta que los pringados/as siguen siendo los mismos/as de siempre, lo se…, lo se… lo tengo asumido, pero al menos dadme derecho al pataleo.
Lo que me fastidia sobremanera es tanta ostentación de medallitas, porque… ¿Qué han hecho para ganarla?, ¿Qué puñetas han acreditado?, no estaría de más que se propusiera en el seno del Parlamento Europeo la creación de la MMSC (medalla al merito por salvar el culo), seguro que no faltarían pecheras donde colgarlas, al menos esa sí que podrían justificarla ¿o no?





Las declaraciones de amistad eterna proporcionan la oscuridad, y, la guerra es como un ladrón al que le gusta llegar siempre por la noche. Coleritge


4 Comments:

At 20 de junio de 2007, 9:37, Anonymous Anónimo said...

Desde que el mundo es mundo siempre han habido pringados, asi son las cosas y por supuesto se admite el derecho al pataleo continuo..., el enriquito como muchos pertece por cuna y otros por dinero a los que se salvan, son aquellos que no se porque le pueblo encumbra en el Olimpo y los mantiene a su costa sin que hayan acreditado que se merezcan nada, es sabido que en cualquier pais cuando se arma el jaleo, todos huyen como ratas y luego el pueblo en plan gilipollas los recibe a la vuelta como heroes, es incomprensible, pero es así.
De cada día creo que son menos los dispuestos a morir por el Rey y la Patria, pero alguno si habra, alguno.
No creo que si Lequio fuera proclamado Rey pasara nada, lo aclamarian y me pregunto ¿acaso seria mejor o peor de lo que tenemos?, que quereis que os diga...

Elvi

 
At 21 de junio de 2007, 13:27, Blogger quieroseryo said...

Como bien comentas querida Elvi, siempre ha habido y siempre habrá, pringados en este mundo, aunque estoy de acuerdo que un príncipe, quede relegado de asistir al frente, teniendo en cuenta, que un hijo de militar, casi siempre, queda relegado de realizar dichos servicios cuotidianos del día y, creo, son los primeros en no dejar que sus hijos tengan que participar en una guerra, teniendo en cuenta, cuando yo realice el servicio militar, los hijos estaban en contra de ser militares, al menos los que yo conocí, con esto no quiero generalizarlos a todos. También discrepo que no estén dispuestos a morir por la patria y el Rey, además, es su obligación, ellos cobran para esto del estado, para defender la patria y al Rey, a través de un juramento, que espero al día de hoy, siga realizándose.
Detesto cualquier tipo de guerra, pero por los vientos que corren, vale más estar preparados, que luego tener que lamentarnos.
Y a todos vosotros, que estamos tan en contra de la violencia, no me gustaría veros en la necesidad de defender a vuestra casa y familia, delante una sublevación, sea nacional, extranjera o callejera.
Seguro que nuestro presidente y todo el gobierno se pondrá en primera línea para defender nuestro país.
Para conseguir la paz, tenemos que saber quien es nuestro enemigo, ¿nosotros, lo sabemos? ¿estamos preparados?
Estoy de acuerdo con Javier, respeto a las medallas conseguidas, principalmente del valor demostrado. Quiero un MMSC.

 
At 22 de junio de 2007, 11:18, Anonymous Anónimo said...

Mi estimado quieroseryo, cuando en este pais se hablaba de todo por por la Patria muchos los hijos de militares tenian la perrogativa de hacer solo el "campamento" y es cierto y de todos conocidos lo que afirma el San Bernat siempre pringan los mismos, cuando hay un peligro los que pueden escurren el bulto. Nadie tiene la obligacion de morir por nadie ni mucho menos se le paga por ello, por mi condición en mas de una ocasion me he visto con las pelotas en la garganta y el nudo en el estomago, es mi trabajo como el tuyo cuando tienes que tocar un cable de alta tensi´ñon es un riesgo calculado y si falla pues..... pero nadie va a la guerra a morir si no a cumplir y salvar el pellejo, en los frentes en muchas ocasiones el oficial debe de estar detras para empujar a los soldados y en muchos casos pegar un tiro a los que salen corriendo, es asi de triste.
Si a las guerras fueran los politicos, sus hijos y los hijos de los que las montan con ellos, de seguro que no habria...
Al fin y al cabo tendrian que dar la vida por la patria el enrique, el felipe y otros muchos de sangre azul, al fin y al cabo ella es la que los mantiene en sus previlegios y tambien nosotros que somos gilipollas, nuestro Javier se cabrea y bien sabe que nada cambiara, pero bueno eso nos queda el derecho al pataleo.
En cuanto a la medalla, no me gustaria ponerme esta en la pechera, no todos somos tan inutiles, aun hay gente que da el callo en muchos aspectos, mira a la "pitufeta" con dos ovarios, se pasea por Madrid exigiendo, hay muchas formas de tenerlos pbien puesto, y no solo pegando tiros.

Zorro

 
At 25 de junio de 2007, 10:19, Blogger quieroseryo said...

Apreciado Zorro, estoy de acuerdo en la prerrogativa, pero seguro bien sabes, que algunos hijos de militares, por seguir la carrera familiar, estaban “forzados” a continuar con la tradición familiar, muy en contra de realizarla. A nadie le gusta la guerra, pero, por desgracia, aquí están, y nosotros sin quererlo también, aunque sea en ayudas humanitarias, ayer mismo, fallecieron cinco o seis militares en un atentado, y allí no están en guerra con España, doy por sentado, que si nuestro país estuviera en guerra, a parte de estar en ayuda humanitaria, también nos defenderían, hasta la muerte si fuera necesario, y por desgracia, nosotros también participaríamos, aunque fuera para defender nuestra casa.
Se me olvidaba, entendida la indirecta de las medallas, prefiero no tener ninguna, que una de MMSC, vale más ninguna que una por derecho.

 

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